En nuestra búsqueda del mejor Rincón del Bosque, nos fuimos ayer a la Senda de los Molinos de Bimenes. Un total de 29 personas, bajo una insistente lluvia y con algo de retraso, comenzamos a caminar en torno a las 11.20 de la mañana.
Nos esperaban 3 horas de tranquilo paseo, en una ruta de naturaleza dominada por el agua, siempre presente de manera natural en el río y de forma circustancial por la intensa lluvia que caía por momentos. Pero aún así no era suficiente para amedrentarnos o para hacernos desistir de la idea de seguir río arriba.
A medida que íbamos caminando, la naturaleza nos iba dando pequeñas sorpresas, en forma de preciosos helechos de ciervo resaltados por el brillo de la lluvia, acebos adornados por sus rojos frutos, viejos troncos cortados cubiertos de gruesas capas de musgo, o setas, entre estas últimas encontramos los deliciosos rebozuelos, algunas rúsulas, deliciosos champiñones, preciosos grupos de armilarias o las venenosas Amanitas panterinas, casi en cada rincón del bosque.
Desde luego no era plan de comer setas crudas en el monte, pero no hacía falta, para eso estaba el camino repleto de castañas, avellanas y nueces que no pocos aprovechaban e iban comiendo al tiempo que caminando.
Con el avance la mañana la lluvia iba cesando, fuimos cerrando los paraguas y quitando las capuchas, cruzando el río y ascendiendo en busca de los dos últimos molinos. En el Molín de Milio, explicamos el funcionamiento de un molino a los más pequeños y a algunos de los adultos que nunca lo habían visto funcionando, y allí llegó la primera entrevista a dos de las excursionistas más jóvenes del día Eva y Cecilia.
Cinco minutos más tarde llegábamos al Molín de Honorio, el último de este magnífico rincón del bosque, frente a una preciosa cascada y bajo un bello ejemplar de tejo, en este rincón del bosque aprovechamos a realizar la segunda entrevista.
Desde aquí sólo nos quedaba descender hasta el Molín de Milio nuevamente y retroceder un poco en dirección a Melendreros. Apenas 15 minutos después y caminando sobre un antiguo camino empedrado, terminamos esta ruta por la naturaleza asturiana, la primera visita guiada gratuita de la Comarca de la Sidra de 2010, dentro del marco del programa Una Vuelta a la Manzana.
La semana que viene nos vemos en la ruta del ríu la Peña en Nava. Os dejamos con la última entrevista, realizada a Daniel Alonso, en el pueblo de Melendreros, sobre el valle por el que acabábamos de subir en la Senda de los Molinos de Bimenes.
Desde luego no era plan de comer setas crudas en el monte, pero no hacía falta, para eso estaba el camino repleto de castañas, avellanas y nueces que no pocos aprovechaban e iban comiendo al tiempo que caminando.
Con el avance la mañana la lluvia iba cesando, fuimos cerrando los paraguas y quitando las capuchas, cruzando el río y ascendiendo en busca de los dos últimos molinos. En el Molín de Milio, explicamos el funcionamiento de un molino a los más pequeños y a algunos de los adultos que nunca lo habían visto funcionando, y allí llegó la primera entrevista a dos de las excursionistas más jóvenes del día Eva y Cecilia.
La semana que viene nos vemos en la ruta del ríu la Peña en Nava. Os dejamos con la última entrevista, realizada a Daniel Alonso, en el pueblo de Melendreros, sobre el valle por el que acabábamos de subir en la Senda de los Molinos de Bimenes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario